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Son muchas las personas que suelen encontrar los hogares de familiares y amistades, agradables y que sin embargo nunca acaban por ver su hogar tan ideal como les gustaría, por ello tienden a seguir añadiendo muebles y elementos decorativos, a la vez que siguen sin lograr que su hogar les termine de convencer del todo. ¿Te suena?

Si tu respuesta es afirmativa, es muy posible que podamos ayudarte con una serie de consejos para logar que al fin termines sintiéndote orgulloso/a tu hogar.

 

1. Céntrate, respira hondo y toma hoja y lápiz

Tómate un tiempo para sentarte relajadamente ante una hoja en blanco, pensando qué tipo de decoración te gusta más. ¿La escandinava o nórdica? En ese caso necesitarás muebles y elementos decorativos de madera, en blanco y de aspecto natural. ¿Te gustan más los dorados y tejidos suntuosos?, ¿o te va más lo moderno, tipo muebles de montar y usar?.

Una vez que te decidas por un estilo, ponte en pie y paséate por tu hogar anotando qué muebles y objetos tienes para según qué estilo. Hazlo como si estuvieras en un concurso y tuvieras que añadir los distintos elementos a las distintas cajas-estilo determinado.

Cuando termines, podrás ver qué estilo predomina en tu hogar y entonces podrás decidir qué elementos vender o regalar y cuáles conservar. También puedes optar por decorar la casa en un estilo ciertas habitaciones y en otro estilo, otras.

 

2. Recurre a los comodines

Nuestros hogares nunca son escaparates ideales de un determinado estilo porque frecuentemente a todos nosotros siempre nos gustan varios elementos de estilos diversos. Por eso mismo, puedes optar por crear subambientes de diversos estilos dentro de una misma habitación siempre que no mezcles estilos.

Para ello, te aconsejamos que te apoyes en determinados muebles como “comodines” que te unan los dos ambientes. Así por ejemplo, observa cómo en la imagen de la izquierda, una sólida y clásica estantería de cuerpo entero separa una habitación nórdica (A) de un saloncito más ochentero (B). O cómo –en la imagen de la derecha- un conjunto de sillas y butacas de madera sirven para armonizar una mesa de comedor moderna de cristal (B) con un salón más tradicional y clásico (A).

3. Juega con las mesas

Como ves, elementos como las mesas pueden llegar a ser fundamentales en tu hogar, para dotar de homogeneidad a todo el conjunto, aunque mezcles elementos que podrían parecer en un principio totalmente antagónicos. Y es que una mesa de cristal puede combinar perfectamente con todo tipo de estilo decorativo. Y lo mismo puede decirse con la madera sólida, que se adapta a todo tipo de materiales y texturas.

 

4. Ten picardía con los sofás

Si barajas diferentes estilos en una misma sala, será un excelente aliado el disponer de un sofá de diseño, en tonos neutros (blanco, beige claro o negro) que llegado el momento podrás “tunear” adaptándolo a los estilos que añadas, a través de complementos tales como alfombras, cojines o telas. Además hay determinados tapizados que combinan con todo, ya sea como patchwork, o con diseños por los que nunca pasa el tiempo.

Así por ejemplo, si te fijas en las imágenes que te mostramos a continuación, verás como un sofá blanco clásico, de polipiel o de tela se adapta a la perfección tanto a estilos rococó-brillante (izda), al estilo nórdico tradicional (centro), como a un ambiente moderno urbano (dcha).